Un Estudio Acústico es un documento que define las medidas correctoras que se deben implantar en una actividad (cuyos niveles de presión sonora sean iguales o superiores a 70dBA) para que, una vez entre en funcionamiento, se cumplan todas las normas de calidad y prevención acústicas de aplicación. Debe ser previo a la entrada en funcionamiento de la actividad y debe acompañar al proyecto de actividad que se redacta para la solicitud de licencia municipal.
Esto es diferente de la Certificación Acústica, que consiste en un documento que plasma los resultados de las mediciones acústicas realizadas y se “certifica”, si fuese el caso, el cumplimiento de las exigencias acústicas de aplicación. Para la certificación acústica contamos con colaboradores que realizan las mediciones acústicas, pues sólo pueden ser realizadas por personal técnico competente que, entre otros requisitos, forme parte de un Laboratorio de Control del Calidad en la Edificación que tenga implantada la norma UNE-EN ISO 17025:2005. Un buen Estudio Acústico no sólo debe servir para satisfacer el requerimiento que nos haya podido hacer el Ayuntamiento correspondiente, sino que además le va a dar un valor añadido a tu local con el menor coste posible. Invirtiendo los recursos necesarios en la redacción de un buen Estudio Acústico previo ahorrarás tiempo y dinero.