El Catastro Inmobiliario (dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda) es un poderoso inventario en el que se describen los bienes inmuebles. En ocasiones, la realidad física de una finca (lindes, superficie, etc.) y su descripción catastral no coinciden, produciéndose situaciones de discrepancia. Es aconsejable solventar la discrepancia de cara a evitar algún disgusto a largo plazo: problemas a la hora de vender la finca, disputas de propiedad entre colindantes, errores en futuras expropiaciones o reparcelaciones, etc. Para ello es importante contar con un técnico cualificado que apoye y constante que efectivamente no coincide la realidad inmobiliaria con la descripción reflejada en el Catastro.